Mientras los expertos internacionales del
área aseguran que faltan ingenieros petroleros a nivel mundial, en Bolivia la
figura es contraria: demasiada oferta de profesionales para tan poca
demanda. Se estima que existen 13 mil estudiantes en las carreras de gas y
petróleo en al menos 13 universidades del país. De este total de estudiantes,
alrededor de 800 egresan cada año y sólo entre un 5% a 8% son incorporados al
mercado laboral, sostiene Carlos Sánchez, decano de la Universidad Aquino de
Bolivia (Udabol).
En el resto del mundo, se
espera que al año 2020, la demanda de profesionales y técnicos en la industria
energética crezca un 20%, mientras que un 50% se retirará, explica Hubert
Arbildi, gerente de Recursos Humanos de Administración Nacional de
Combustibles, Alcoholes y Portland de Uruguay (ANCAP).
Arbildi considera que esto generará una brecha de conocimiento. ¿Qué hacer?, ¿Cómo atraer el conocimiento y desarrollar el liderazgo? Son más bien algunos de los grandes desafíos que atraviesa el sector.
Un claro ejemplo de esto es lo que sucede en México ante la bonanza pronosticada con la Reforma Energética de 2013, iniciativa presentada por el Presidente, Enrique Peña Nieto.
Se estima que en sólo diez años se requerirán por lo menos 20 mil profesionales y especialistas del sector. Esta falta de capital humano es ocasionada por una plantilla laboral de edad promedio de 45 años y que no tiene los suficientes cuadros jóvenes que los releven.
Según el Centro de Investigación para el Desarrollo (CIDAC), en la siguiente década al menos 20 mil trabajadores de confianza de Petróleos Mexicanos (PEMEX), se jubilarán y necesitarán que las nuevas generaciones tomen su lugar.
También se necesitarán entre 20 y 25% más expertos en metalurgia, minería, petróleo y geofísica.
Arbildi considera que esto generará una brecha de conocimiento. ¿Qué hacer?, ¿Cómo atraer el conocimiento y desarrollar el liderazgo? Son más bien algunos de los grandes desafíos que atraviesa el sector.
Un claro ejemplo de esto es lo que sucede en México ante la bonanza pronosticada con la Reforma Energética de 2013, iniciativa presentada por el Presidente, Enrique Peña Nieto.
Se estima que en sólo diez años se requerirán por lo menos 20 mil profesionales y especialistas del sector. Esta falta de capital humano es ocasionada por una plantilla laboral de edad promedio de 45 años y que no tiene los suficientes cuadros jóvenes que los releven.
Según el Centro de Investigación para el Desarrollo (CIDAC), en la siguiente década al menos 20 mil trabajadores de confianza de Petróleos Mexicanos (PEMEX), se jubilarán y necesitarán que las nuevas generaciones tomen su lugar.
También se necesitarán entre 20 y 25% más expertos en metalurgia, minería, petróleo y geofísica.
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